Un UROGALLO "LOCO".

En uno de sus recientes viajes escandinavos,  Javier Flandes tuvo la fortuna, prácticamente irrepetible, de padecer los ataques de un macho de urogallo que defendía su territorio atacando incluso a las personas que se acercasen más de la cuenta. Lo de "loco" es una impresión mía que no sera seguro muy real pero que ya ha sido utilizada anteriormente para describir algún comportamiento de esta especie

Así sucedieron los hechos

Uno de los días al atardecer antes de retirarnos al hotel el guía nos llevo por unos caminos del bosque  hicimos un recorrido a pie en el que pudimos observar excremento de urogallo y de regreso a la camioneta nos sorprendió el avistamiento de un precioso y majestuoso urogallo, que no solo se dejaba ver y fotografiar sino que acudía hacia nosotros, parecía increíble tan grande, con tanto reflejo de colores con un plumaje tan denso, con una actitud tan arrogante, estaba embobado viéndolo a escasos metros cuando en un instante lo vi  junto ami tratando de darme picotazos y sufriendo el empuje de su alas. Uno de los picotazos hizo blanco en mi objetivo ya que con la cámara me defendía del ataque directo y la consecuencia fue un importante agujero. El ave iba de unos a otros tratando de alcanzar con sus picotazo en su agresión nos siguió hasta la camioneta a la que también ataco. No paraba de cantar y se comportaba como si fuésemos machos rivales.

Este comportamiento anormal se produce en algunas ocasiones, el guía local decía que desde hacia 15 años no se había producido en esa zona y que era un caso de un agresividad poco usual y que esto terminaría con su vida en pocos días por agotamiento o por no presentar su comportamiento habitual con posibles predadores.

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